(Especial Personajes de Actualidad)
Santiago Carrillo: Iba a empezar el artículo de hoy con la marcha de Esperanza Aguirre de la política activa (al menos de momento) pero y aunque para muchos pueda perecer (por lo que se resisten a hacerlo) que el abandono de la política es cuasi la muerte en vida, siempre será más notorio el abandono real y definitivo de la vida, que el abandono del cargo, la poltrona, los focos o en definitiva el paso atrás en una actividad, que como debe ser la política no es eterna.
Santiago Carrillo, aunque lo pareciese, tampoco era eterno y ayer dejó plácidamente paso en esta vida para pasar, a los libros de historia a los que ya pertenecía su dilatada trayectoria, política, intelectual y en definitiva humana.
No voy a hacer, un repaso exhaustivo a esa trayectoria, pues estos días se harán muchos y algunos muy documentados, mientras otros se circunscriban a tópicos típicos, que van desde su participación en la Guerra Civil (con la ineludible cita a Paracuellos), la organización en el exilio del PCE y de la lucha antifranquista, la transición (peluca incluida), la posterior expulsión de su partido (Gerardo Iglesias y Anguita de por medio) y su plácida y lúcida, última etapa como contertulio y agudo analista.
Si quiero hacer unas puntualizaciones de esa trayectoria, que como todo en la vida tiene luces y sombras, prevaleciendo eso sí, las luces, sobre los aspectos más oscuros.
Así para mí Carrillo tiene una enorme dimensión en cuatro momentos, una dimensión ética y digna en el primer momento, una dimensión moral y democrática en el segundo, una dimensión práctica y generosa, en el tercero y una dimensión didáctica e ideológica en el último.
La primera, la que se engloba en la ética y la dignidad es aquella, en que Carrillo, junto a Rojo, Miaja, Besteiro y algunos dirigentes más queda a cargo de la defensa de Madrid, mientras el Gobierno Republicano se refugia (o huye) en Valencia. Carrillo ahí demuestra no abandonar al pueblo y me parece digno de elogio.
La segunda, es cuando Carrillo, que tras la Guerra Civil, abraza el Stalinismo y se exilia primero en la URSS, cae del caballo represor del Partido Comunista de la Unión Soviética, tras los sucesos de la Primavera de Praga y esa separación que empieza a producirse con el PCUS, da germen finalmente a la creación con Berlinguer y Marchais de lo que se llamó Eurocomunismo, prevaleciendo los criterios morales y democráticos sobre las ayudas que podían venir del gigante soviético.
La tercera, he de reconocer, que es la que menos me gusta, esa dimensión práctica y de enorme, yo diría incalculable generosidad por parte de la izquierda y en concreto del PCE y del PSOE de Carrillo y Felipe, en lo que fue la transición y que si bien nos trajo, es cierto, de ahí su practicidad, la democracia, no es menos cierto, que lo hizo sin ruptura, sin juzgar a los culpables, al franquismo, sin República, sin solución definitiva del problema territorial y sin la rehabilitación de la memoria de aquellos que un día lucharon por la libertad. De muchos de aquellos polvos… provocados por la generosidad de Santiago Carrillo y otros líderes de la izquierda en la transición, puede que vengan estos lodos.
La cuarta es la de su etapa de tertuliano con Herrero de Miñón, con Ernst Lluch, y con Pere Portabella, después, en el programa de Gemma Nierga, La Ventana en la cadena ser, yo ahí aprendí mucho de los “sabios” como los llamaba la presentadora, y además pasé estupendos ratos, con su sentido del humor y su análisis lúcido de la realidad. En los tiempos que corren gente como Carrillo, el propio Herrero en las filas de la derecha, Lluch o Portabella, son imprescindibles, e imprescindible es que los medios de comunicación busquen a estos “sabios” que sucedan a los que se van marchando y se enfrenten con agudeza a tanta estulticia que en forma de Belén Esteban, Tomás Roncero o Alfonso Rojo (entre otros/as muchos) vemos en las tertulias actuales.
Esperanza Aguirre Gil de Biedma. Tras su “muerte”, no sé si “suicidio”, en este caso y por fortuna, solo política, también ha recibido múltiples elogios, de sus seguidores, (los Cavernarios de cabecera, Jimenez Losantos, Vidal y demás fauna ibérica rancia y casposa) Y también con la boca pequeña de sus “enemigos íntimos” Gallardón, Rajoy, Soraya, ¿Cospedal? Etc.
A mí que se vaya, por su propio pie, Esperanza Aguirre, como diría un castizo “Me la trae floja”, más cuando deja a su segundo Ignacio González, que va a hacer su “mismica” política de favorecer a los que más tienen contra los que menos poseen, no olvidemos que la última “parida” de este dúo es ese engendro llamado Eurovegas.
No me apetece entrar en sus múltiples meteduras de pata, ni en sus salidas de tono, ni en su falta de respeto etc. Lo que si me apetece, es recordar, porque nunca está de más, que esta señora, (que tiene eso sí el honor de haber sido la primera mujer presidenta del Senado) llegó a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, por la acción todavía no aclarada de 2 tránsfugas del PSOE, (de los que nunca más se supo, que curioso) que se negaron a votar a favor de la investidura de Rafael Simancas, tras el acuerdo alcanzado con IU.
Y me apetece recordar, que tras aquel acto, que dio lugar a nuevas elecciones y la mayoría absoluta de Espe. La Comunidad de Madrid se convirtió en ese sitio donde los especuladores, los medios de comunicación cavernario-fascistas, los corruptos de la trama Gürtel y otras tramas, los fanáticos ultracatólicos y ahora los ultras (Adelson es el mayor apoyo económico del candidato Mormón a la Casa Blanca) millonarios estadounidenses del juego y vete tú a saber que otras cosas tienen su hábitat y campan a sus anchas.
A los que celebran la marcha de Aguirre, solo decirles que no corran tanto, los rumores en torno a sus sucesoras… 1º La Botella, ya saben, Alcaldesa a dedo de Madrid, Legionaria de Cristo, esposa del de la foto de las Azores, 2º La Cospe… sí, por todos conocida, nada que añadir, salvo que en Castilla-La Mancha nos ahorraríamos una pasta en dietas, “aves” y demás, ya que aunque viniese más de visita como Presidenta de la Comunidad vecina, (que no lo dudo, lo afirmo) que ahora, nos saldría más barato el viaje porque lo pagarían los madrileños y la 3ª y parece con más posibilidades, aunque sea menos famosa, la ínclita Consejera de Educación, Lucía Figar “miembra” al parecer de otra “secta” ultracatólica “los cielinos”, algo así como unos “Opusinos” modernos o unos “kikos” más pijos y responsable de que actualmente la Comunidad de Madrid, tenga (y es la única) más colegios concertados que públicos, que se aumenten las subvenciones para ellos, mientras se recorta en la enseñanza pública, que se segregue en las escuelas sin que pase nada etc. etc.
Así que buen viaje, para Espe, pero nada de euforias no sea que vayamos de Málaga a Malagón o de Guatemala a Guatepeor.
Juan Carlos de Borbón: Como dice mi amigo El Catedrático, aunque no sé si la frase es suya, lo malo de los Borbones es que siempre acaban Borboneando…
Y así es el ciudadano Juan Carlos, o el ciudadano Borbón, como prefieran o como diría cualquier Republicano que se precie, se descuelga esta semana con una infumable carta (que le habrán escrito, pues sabemos que él, como toda su ralea es más de cazar que de escribir) en la página web de La Zarzuela (su casa) donde apela a la unidad, a remar en la misma dirección y otras estupideces típicamente borbónicas y propias del verbo Borbonear, que nos ocupa.
El término “Borbonear”, acuñado ya en los tiempos de Fernando VII, uno de los personajes más nefastos de la historia de esto que llamamos España, implica la acción típica de los reyes, príncipes, etc. etc. de la Casa de Borbón, de engañar, engatusar a su pueblo, con ese aspecto simpático y campechano, para luego hacerles “putadas varias” con el fin de mantener sus privilegios.
Antes que Fernando VII, ya hubo Borbones nefastos, desde el inaugurador de la saga en nuestras tierras Felipe V, principal culpable, de lo que hoy se llama cuestión territorial, separatismo etc. y el propio padre del Rey “Felón”, Carlos IV, culpable este de otras divisiones entre españoles partidarios de él mismo y de su nefasto hijo.
Desde Fernando VII, hasta aquí, nuevos Borbones dignos de mención y responsables de más guerras entre hermanos, Isabel II y todos los aspirantes de la parte Carlista de la familia y el inefable Alfonso XIII, amparador de dictadores y caciques de todo tipo, hasta llegar al actual monarca, que a fuerza de repetirlo nos hemos creído que es bueno.
Y ya lo dice el dicho: El único rey bueno es el rey depuesto (ya el dicho es más duro, pero en fin…) El caso es que el tal Juan Carlos, me sale ahora con esas zarandajas de la unión y tal.
Uniones y tal que no pedía, cuando los de la AVT, los del Aborto, los del Foro de la Familia y otros ultras, querían derribar al gobierno de Zapatero, por ejemplo.
Unión y arrimar el hombro, que no pedía ni pide, para mantener los servicios sociales, la educación, la sanidad o los servicios públicos básicos.
Ni le pide unión a la banca, ni a las grandes empresas y corporaciones, ni a los presidentes de autonomías, ni al gobierno para evitar los despidos masivos, los EREs y demás atentados contra los trabajadores.
No, él parece que pide unión para que no le quiten un trocito de su cortijo y para que todos digamos amén a los recortes y a sus andanzas.
Pues mire, ciudadano Borbón, vayasé por ahí con sus Borboneces y conmigo no cuente.
José Tomás: Llegando al final y sabida ya mi “casi total” pérdida de afición taurina, me parece surrealista el bombo que se le da a un torero por una corrida en Nimes, cuando solo ha toreado (y por propia voluntad) 3 ó 4 tardes en la temporada y en plazas de segunda.
Es como si Contador no fuese al Tour, ni a la Vuelta, ni al Giro, pero se le loase por una exhibición en la Vuelta a Burgos, o como si Messi, no jugase en toda la temporada, pero le metiese 5 goles a la Ponferradina en Copa, o Alonso no corriese el campeonato del Mundo pero ganase una carrera de Karts…
Vamos, que figurón del toreo…, figurín, si acaso.
Ramón Lara y Javier Morcillo, por fin parece que PSOE e IU hacen oposición en el Ayuntamiento con el Pliego de las Basuras y otras acciones, mientras otros parece que siguen sin ver la realidad o siguen abducidos en una realidad paralela.
